¿QUÉ MES ES EL MEJOR PARA COMENZAR UNA REFORMA?
¿En verano o en invierno o más bien en primavera? Sí, somos conscientes de que a todos nos cuesta mucho decidir cuál es el mejor momento para comenzar una reforma en casa, tanto por una cuestión económica, como por una cuestión práctica ya que cualquier obra, por pequeña que sea, supone ciertos cambios en nuestra cotidianidad.
Estamos seguros de que cada vez que le has preguntado sobre el tema a algún amigo o conocido has obtenido siempre la misma respuesta: cuando haga buen tiempo, en verano. Y aunque eso «a priori» pueda parecer verdad, ya que en esa época pasamos más tiempo fuera de casa o incluso puede que estemos de vacaciones, la verdad es que no existe un mes mejor para comenzar una reforma ya que todo dependerá de varios factores y, entre ellos, los materiales que se utilizarán y la ubicación de la vivienda.
Hoy desde Vasco Andaluza Reformas queremos darte algunas claves que te ayudarán a tomar la decisión más adecuada y por eso vamos a hablar de los pros y los contras de cada época para rehabilitar, reformar o cambiar alguna habitación de tu hogar.
A pesar de que la reforma de una vivienda se pueda realizar en cualquier época del año, hay ciertos materiales que necesitan unas condiciones climáticas determinadas y en ese aspecto, además, la ubicación de la vivienda puede ser determinante.
Desde el 16 de julio hasta el 9 de septiembre
Si, por un lado, uno de los beneficios del verano es que nos permite tomarnos con más calma las reformas y, al disponer de más tiempo, tener un mejor control de las obras, por otro lado, hay materiales que en los meses más calurosos pueden verse afectados en sus propiedades por culpa de las temperaturas elevadas. Por ejemplo, el cemento, el yeso, la pintura y el barniz tienen un secado mucho peor con el calor, lo que puede hacer que se agrieten. Con lo cual, si vivimos en una zona muy calurosa, deberíamos evitar obras en esta época.
Otro punto a tener en cuenta si queremos hacer una reforma en verano, y que puede acabar en el listado de los contras, son las vacaciones del ayuntamiento, así como de profesionales, empresas y almacenes del sector que necesitemos para encontrar los materiales. Los cierres habitualmente comienzan a mediados de julio y llegan hasta finales de agosto, y en la mayoría de casos se alargan hasta la primera decena de septiembre, coincidiendo con la vuelta al cole.
Así que, si necesitamos licencias o permisos especiales, debemos tener en cuenta los tiempos de concesión por parte del ayuntamiento, así como sus días de descanso y tramitar la solicitud con la antelación necesaria para que nada nos impida comenzar a reformar nuestro hogar tal y como teníamos planificado.
Por lo tanto, nuestra recomendación en general, es la de evitar la época que va desde mediados de julio hasta el 9 de septiembre, ya que por varios aspectos que hemos mencionado puede acabar siendo el peor momento para una reforma sin imprevistos y demasiados problemas.
Desde el 10 de septiembre hasta el 5 de diciembre
El invierno es, por lo general, considerado una buena época para reformar, con temperaturas más favorables para ciertos tipos de materiales y con facilidad para contratar profesionales y empresas, así como acudir a almacenes.
Sin embargo, dependiendo de dónde se ubique la vivienda, las mejores semanas dentro del periodo invernal son las que traigan menos lluvias, ya que de esta manera todo secará con mayor rapidez y evitaremos el tener que paralizar la obra cada dos por tres.
Desde el 6 de diciembre hasta el 7 de enero
A pesar de que el invierno sea bastante mejor que el verano para comenzar una reforma, no faltan los problemas relacionados con días festivos y que por lo tanto podrían retrasar bastante nuestras obras. Empezando por el puente del 6 al 8 de diciembre y siguiendo con las Navidades hasta el 7 de enero, los días laborables se reducen considerablemente.
De hecho, desde el día 22 de diciembre hasta el 7 de enero, la mayoría de profesionales cogen vacaciones por convenio del sector de construcción y los almacenes cierran puertas respetando estas fechas sagradas. Incluso en algunas provincias hay hasta 20 días no laborables, que comienzan a partir del día 6 de diciembre. Las peores fechas para emprender cambios en nuestro hogar, son entonces las que van desde el día 6 de diciembre hasta el día 7 de enero.
Desde el 8 de enero hasta el 15 de julio
Pasados los días festivos y tras haber disfrutado de las Navidades, llega el momento de ponerse manos a la obra y aprovechar los 6 meses que tenemos por delante antes de que llegue el verano y con él el calor.
Desde el 8 de enero aproximadamente hasta el 15 de julio, es la época que más puntos a favor tiene para realizar una reforma, junto a la que va desde el 10 de septiembre hasta el 5 de diciembre. Excepto Semana Santa y algún día festivo suelto, la mayoría son días laborables y cuanto más nos acercamos a la primavera más llegan meses propicios para secados rápidos gracias a una buena ventilación sin humedad ni calor.
Trabajos tales como pintura general, modificación de tabiques, alicatados de la cocina o los baños, conducciones de gas o calefacción e instalaciones eléctricas son perfectos para realizar en los meses de mayo y junio.
Sea cuál sea la época por la que te decantes, lo más importante es siempre tener una buena planificación de tu proyecto de reforma para garantizar que todo salga bien y que el agobio de los retrasos y los imprevistos no acabe afectando al resultado final. Calcula bien los tiempos que necesitas para obtener la licencia de obras, haz un plano de los cambios que quieras realizar para facilitar la tarea a los trabajadores y que todo sea más fluido. En cualquier caso, si ves que por lo que sea se necesitan unos días o unas semanas de más para acabar, sé paciente… ¡ya sabes que las prisas nunca son buenas!
Y por último, recuerda que antes de comenzar con cualquier reforma, la ayuda de una empresa o un profesional del sector puede marcar la diferencia. En Vasco Andaluza Reformas te lo ponemos fácil, cuéntanos tu idea y te proporcionaremos los especialistas que más se adapten a tus necesidades.
